“Como docentes enmarcados dentro de una legislación provincial, es importante que no se desconozca la reglamentación nacional que nos da un marco organizativo como país. Debemos tener siempre presente las jerarquías: el Código Civil y Comercial está por encima de los decretos que regulan la actividad docente”, comenzó la disertación la abogada.
Según Volonté, desde lo terminológico el cambio de la posición reglamentaria se hizo visible en el tratamiento de diferentes cuestiones como la visión de los menores de edad. Antes se consideraba niños a todas aquellas personas menores de 18 años y ahora desde los 13 hasta los 18 años se los define como adolescentes.
También detalló que “con el nuevo Código, la patria potestad pasa a denominarse “cuidado parental”. Esta comprende el cuidado personal del hijo por los progenitores y la guarda otorgada por un juez a un tercero”.
Luego la disertante llevó a cabo un debate grupal con los asistentes donde se conversaron temas puntuales y consultas. Teniendo en cuenta los tópicos debatidos, realizaron una lista con situaciones prácticas que siempre generan debates y problemas a la hora de ser abordadas:
“Con respecto al retiro escolar del alumno, ambos progenitores tienen la responsabilidad respecto de sus hijos. También lo puede hacer el protector afín incorporado por una notificación formal. Para una restricción a alguno de los padres, debe haber una aviso con una resolución de carácter judicial restrictiva”, detalló la especialista.
En relación a lo que se refiere a autorizaciones para excursiones, aclaró que es prioritario tener los datos de la familia que aprueba al menor a realizar el viaje y ser muy precisos con la información como fechas y horarios de salida y llegada para evitar reclamos.
Además informó que, en las situaciones vinculadas con alumnos adolescentes o mayores de edad, hay que tener muy en cuenta que un chico mayor de 18 años puede retirar su propio boletín si así lo desea.
“En las denuncias relativas a posibles situaciones de violencia, si es una situación extrafamiliar, la obligación de denunciar corresponde a los progenitores. En cambio, si es intrafamiliar se debe recurrir al directivo y pasar por los diferentes niveles como las denuncias policiales en Fiscalía. Nunca se deben saltar estas etapas”, concluyó.
